Estiman que rendimiento promedio de la soja será de 1.500 kilos por hectárea
20 marzo 2018
El rendimiento promedio de la cosecha de soja a nivel nacional debería ser de unos 1.500 kilos por hectárea, estimó el asesor privado e ingeniero agrónomo Andrés Contatore, asesor privado que fue entrevistado este lunes por Agronegocios Sarandí.
“Soy bastante pesimista y drástico porque la zona litoral-sur, que es muy importante y aporta mucho a los promedios, está muy complicada. El golpe sobre toda la cadena será enorme”, consideró.
Indicó que el rendimiento de equilibrio en esta campaña, o sea cuánto tendría que cosechar un productor para pagar los costos del cultivo, es de entre 2.000 y 2.500 kilos por hectárea -si en esa cuenta se incluye a la renta-.
Pero hay chacras que ya se abandonaron, otras que se pastorearon con ganados, otras donde enfardaron la soja y otras en las que se hizo silo de planta entera. “Esas son chacras con rendimiento cero y este año el que logre empatar tendrá que quedarse muy contento”, dijo.
Consultado sobre las lluvias del fin de semana, Contatore señaló que hay productores contentos y otro ya casi bajando los brazos, porque en muchas zonas dentro del corazón agrícola no llovió o las lluvias fueron muy pocas. “Confirmamos que será una zafra complicada y un invierno bastante bravo”, reconoció.
Agregó que donde mejor llovió fue en las zonas donde ya venía lloviendo, fundamentalmente en la costa. En el litoral-norte el partido ya estaba jugado, pero si llovía podría ayudar a las sojas de segunda, que representan el 20% del área total del cultivo.
A algunas sojas de primera las lluvias podrían ayudar a concretar algún rendimiento bajo, mejorar el peso de los granos o frenar los abortos de vainas. “Sabíamos que el efecto de esta lluvia sería muy limitado, pero también hay un efecto psicológico que también pesa”, reconoció.
Contatore consideró que la situación de los productores se divide en tres: los que saben que tendrán un rendimiento de soja aceptable o incluso bueno (sobre todo aquellos que están en el suroeste del país, en Colonia); otro grupo que tendrá un año malo pero que están saneados económicamente y podrán seguir dando batalla y los que tendrán que dejar campos, achicar su producción o incluso salir del negocio.
En cuanto a las ventas por adelantado de esta cosecha, dijo que hubo una etapa en la que los productores fueron vendiendo, zonas donde se pronosticaban lluvias y los precios eran buenos.
“En la primera quincena de febrero la situación no era tan crítica, sabemos que la soja tiene un gran poder de recuperación y hasta ese momento hubo una tendencia vendedora. También hubo una baja de primas Chicago-Nueva Palmira, pero a comienzos de marzo eso quedó muy quieto. El porcentaje vendido tal vez sea mucho para lo que se va a cosechar, pero tal vez esté entre 500 y 1.000 kilos por hectárea, dependiendo del rendimiento final eso puede ser mucho o poco”, planteó.