
Ambos coincidieron en que la situación se ha ido deteriorando en los últimos años, en los que se pasó de disparos en las piernas al sicariato e incluso ahora a desapariciones.
Holfman señaló que las conexiones internacionales hacen más peligrosa la situación. Como ejemplo de ello, dijo que la Policía tiene ubicado en Brasil a Rocco Morabito (el capo italiano que se fugara de Cárcel Central) que ahora cuenta con la protección del Primer Comando de la Capital.
Escuchá la entrevista.