Denisse Legrand, sobre su denuncia: “¿Qué piensa Cosse? Si no lo rechaza es una práctica que avala”
10 agosto 2021
La activista y comunicadora Denisse Legrand, fundadora de la ONG Nada Crece a la Sombra y exconductora de La Letra Chica, habló por primera vez sobre su salida del programa de TV Ciudad y la denuncia de violencia laboral que presentó contra la directora del canal Alejandra Casablanca.
“Estoy acostumbrada a situaciones de tensión y ámbitos en los que la violencia está muy presente, pero nunca viví la situación que viví en el canal”, dijo Legrand en entrevista con Las cosas en su sitio.
“Agoté todos los caminos políticos antes de llegar a la denuncia. Porque esto nos expone. Expone a los profesionales, al canal, a la gestión. No tuve en ningún momento respuesta de contención ni de entender el problema político que significaba que una jerarquía hubiera ejercido una situación de violencia”, afirmó.
“Lo grave de todo esto, además de la situación particular, es todo lo que vino conexo. La mala dinámica institucional, la falta de capacidades básicas para encarar la situación, y situaciones que escapan a toda la norma, como que hubiera personas y asesores tratando de averiguar cuáles eran mis antecedentes. Para construir, como se hace siempre, la imagen de una mala víctima, la víctima problemática que algo de culpa tiene”, agregó Legrand, en referencia al pedido que hizo el asesor Gabriel Romano a exjerarcas del Ministerio del Interior.
“Esto fue una práctica política institucional que no corresponde. Muchos se llenan la boca hablando de la democracia y los derechos y sin embargo incurren en este tipo de prácticas. A mí me encantaría saber cuál es la postura institucional. Cuando yo se lo planteé a la directora de Comunicación, Ana de Rogatis, y al prosecretario Daniel González no tuve una devolución. No sé qué piensan. Me dijeron: hablá con Romano. Yo no tengo que hablar con Romano. Es un asesor que cumple un lugar. ¿Qué piensa Carolina Cosse de esto? ¿Es una práctica que avala? Si no lo rechaza es una práctica que avala”, argumentó.
Ante la pregunta de si Cosse no debe esperar a que se resuelva la investigación en curso, Legrand dijo que de todas formas puede haber un pronunciamiento político.
“Es una práctica común dejar que se judicialice. Otra cuestión es lo político, que está por encima de todas las cosas. Si lo que uno dice en campaña se traduce después en actos. Si a mí, que soy una privilegiada y puedo estar hablando de esto en una radio, me pasa lo que pasó, ¿qué le puedo decir después a la persona que está pasando por una situación de violencia en el hogar o en una cárcel? Por eso yo también decidí hacer una opción”, narró.
“Me ofrecieron la opción de irme, y otras cosas para evitar esto. Me importa que podamos aprender. Es un proceso doloroso no solo por la situación, sino por cómo se amplifica en prácticas institucionales y políticas que son las que en campaña se rechazan tanto”, dijo Legrand.
La exconductora dijo que planteó su renuncia a mediados de junio, pero no se le aceptó y “a raíz de eso” empezaron las situaciones de violencia. “Sentí que el programa no estaba bien. A mí no me gusta repetir lo que me dicen que diga, no tener ninguna capacidad de incidencia. Es muy difícil ser parte de la cara de algo en lo que no creés”, agregó.
Legrand dijo que no estaba “cómoda” y además disentía “con las prácticas y la manija, y esa forma de ejercer la comunicación”.
“Ante todo lo que pasó, un amigo me decía: ¿Y qué querés? Son hinchas. Y si estás en una guerra en la primera fila, y estás con el fusil y te das vuelta y decís que no querés disparar más, te van a arrancar la cabeza”, contó.
Consultada por su postura anterior respecto al programa –un mes antes de que empezaran los problemas internos, y ante cuestionamientos al programa por su falta de pluralidad, Legrand respondió a quienes los criticaban que “cuando ganen la Intendencia de Montevideo van a poder hacer el canal público que quieran”–, la exconductora dijo que en principio “defendía que los medios públicos deben existir y tener productos de calidad que permitan democratizar las discusiones”.
“Cuando eso se corrió a un lugar que no me representaba, no hay nadie. Ya está. No quiero ser parte de eso”, afirmó.
“¿Quién duda que yo soy de izquierda? Yo creo en una comunicación articuladora, y que se pueda generar debates e intercambio. No la supremacía de ideas porque tenés el control. Sentí que las formas generan algo negativo. Cuando uno forma parte de un proyecto y ese proyecto es nocivo, y la forma de concepción política, claramente la situación ameritaba moverse”, añadió.
Ante la pregunta sobre si les ordenaban qué decir, Legrand respondió: “Cuando uno hace un programa, sabemos que los equipos de trabajo tienen capacidad de incidencia. Todos los programas se guionan. La diferencia es cuando no podés opinar en nada, cuando no podés decir: che estaría bueno que viniera otra persona, otro perfil. O cuando hacés los programas y son todos iguales. ¿Entonces uno se pregunta, esto le hace bien a la gente? Yo sentía que no”.
“Planteé mi renuncia en junio, no se aceptó, planteé una serie de situaciones en las que entendía no era correcto el funcionamiento, como nombres de los programas que manifestaban una postura política sin consultarnos. Yo corro todas mis pelotas. No voy a correr las pelotas de otros”, aseguró.