La Defensoría del Vecino registró un aumento del 25% en los reclamos en 2025 y alerta por el deterioro de la convivencia en Montevideo

Según explicó el titular Daniel Arbulo en Informativo Sarandí, ese crecimiento expone un mapa urbano donde los conflictos de convivencia se han vuelto más frecuentes y más complejos, con expresiones de xenofobia, transfobia y aporofobia que se mantienen y, en algunos casos, se profundizan. Los problemas cotidianos —ruidos, ferias, contenedores, uso del espacio público— conviven con tensiones interpersonales que reflejan un deterioro del diálogo social.

El fenómeno más preocupante, según Arbulo, es el aumento sostenido de personas sin hogar. La proyección realizada junto a la Facultad de Arquitectura estima que para 2030 podría haber 10.000 personas en esta situación solo en Montevideo. El defensor subraya que ninguna de las herramientas legales disponibles —la ley de vagancia, la ley de faltas o la internación compulsiva— ha dado resultados y que el traslado de personas entre barrios no resuelve el problema. Lo que aparece, en cambio, es una trama de vulneraciones: falta de acceso estable a salud, vivienda, redes comunitarias, apoyos educativos o inserción laboral. Esa combinación deriva en episodios cada vez más extremos, como algunos registrados en Ciudad Vieja, y se entrelaza con un clima de violencia social generalizada.

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