Finaliza una zafra de invierno “espectacular”

07 diciembre 2020

Está finalizando una zafra de cultivos de invierno que fue “espectacular”, admitió el productor Darío Jorcín, radicado en Tarariras pero que también tiene chacras en Soriano.

El productor consideró que este fue “un año redondito para los cultivos de invierno”, porque “ayudó el clima y los precios”.

Comentó que terminó de cosechar la colza, y se alcanzaron “muy buenos rindes”, de “hasta 3.500 kilos (por hectárea), algo que no es normal, porque más de 2.000 o 2.200 kilos es difícil sacar”.

Dijo que este fue el séptimo año que realizó el cultivo, y que en general los promedios rondan los 2.000 kilos por hectárea; sin embargo, este año las chacras que rindieron menos estuvieron en esos niveles.

Estos buenos resultados se obtienen a pesar de las heladas tardías, que se registraron a fines de setiembre, que hicieron abortar granos y flores. Pero, de todos modos, “esas canolas (como también se llama a la colza) tienen un llenado de grano tan bueno en octubre, que el grano estuvo pesado, con buen nivel de aceite, así que fue una buena cosecha”, afirmó.

Cebada y trigo
Este miércoles, consultado por Agronegocios Sarandí, Jorcín señaló que está terminando de cosechar la cebada, y estimó que en ese cultivo, así como en trigo “debe de estar en un récord nacional o departamental". "Es el mejor de mis años de chacras. Empezamos a cosechar con (rendimientos de) 5.000 o 6.000 kilos (por hectárea), con muy buena proteína y calidad”, y agregó que “los trigos están muy sanos”, dijo.

Recordó que hace años que se viene "con 4.000 kilos por hectárea de costo, con renta incluida, tanto en trigo como en cebada”. Pero señaló que este año los precios están entre 10% y 20% por encima del año pasado, lo que permite bajar costos.

Recordó que en la cosecha anterior el cereal valía U$S 175 por tonelada y este año está en U$S 215 o U$S 220. “Por lo tanto, si se obtienen más de 4.000 kilos dejará un buen ingreso”, destacó.

También señaló que normalmente los cultivos de invierno permiten pagar media renta anual, y el cultivo de verano deja una ganancia, pero “este año aparentemente tendremos entre U$S 300 y U$S 500 de ingreso por hectárea con los cultivos de invierno, lo que es muy bueno”, admitió.

Las claves de la mejora
Consultado sobre las claves de esa mejora productiva, respondió que tiene que ver con el avance genético, con el manejo de nitrógeno, entre otros factores como el clima.

“En la zona hacemos mucha agricultura por ambientes, se están mejorando los suelos. Y el clima es fundamental. El invierno fue seco, muy frío, la primavera muy fresca, lo que permitió que el llenado de grano fuera excelente, aunque alguna helada tardía pudo haber afectado a alguna canola así como a alguna cebada y trigo”, explicó.

De todos modos, destacó que envió a molinos cargas de trigo con “85 (kilos por hectolitro) de peso específico, cuando en general estamos en 78 u 80. Inclusive las chacras que están con buen nivel de nitrógeno están con 13% o 14% de proteína, con variedades que son panaderas, como Curupay o Ceibo”.

Y en cebada dijo que “las calidades que están llegando a las malterías también son buenas”, aunque si algún camión no puede entrar porque la calidad no alcanza a ser la exigida, “está el mercado de forrajera, que tiene muy buenos precios y conforman”, valoró.

Expectativas para el verano
Sobre la zafra de verano, que inicia, Jorcín dijo que espera que llueva y se puedan plantar los cultivos de segunda. "Los de primera ya están nacidos, tanto el maíz como la soja. Por ahora, aquí en el sur venimos bien, muy conformes”, agregó.

Planteó que “si acompañan los cultivos de verano, cerrará un buen año para la agricultura uruguaya, que venía muy golpeada, sobre todo por los bajos precios”.

Dijo que “no hay que olvidarse que hace dos años hubo una seca muy grande en el litoral, y eso hizo que muchas empresas perdieran mucho dinero, y es probable que en este año se pueda recuperar”.

Aquí la entrevista completa con Darío Jorcín.

Agronegocios Sarandí · Darío Jorcín - Agricultura y lechería